Promover los derechos de la mujer: El nuevo Explorador del Cumplimiento de las Recomendaciones sobre los Derechos de la Mujer

Fuente: https://www.wrrce.org/

Durante décadas, el Reino Unido ha recibido recomendaciones sobre cómo mejorar su trato a las mujeres por parte de Naciones Unidas y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH). En julio de 2022, el Reino Unido dio un paso adelante y ratificó el Convenio de Estambul, un tratado internacional diseñado para prevenir la violencia contra las mujeres. Casi al mismo tiempo que el Reino Unido ratificaba el Convenio de Estambul, publicaba nuevos consejos relacionados con la lucha contra la violencia contra las mujeres.

A pesar de estos y otros esfuerzos, la violencia contra las mujeres persiste. De hecho, las nuevas directrices del Reino Unido para combatir la violencia contra las mujeres iban acompañadas de indicadores que mostraban la alarmante prevalencia de la violencia de género en el país.

¿Por qué, a pesar de los amplios esfuerzos de la comunidad internacional por mejorar los derechos de la mujer mediante tratados y recomendaciones, persiste la violencia de género y la discriminación?

A pesar de la importancia de las recomendaciones de las instituciones internacionales de derechos humanos para la protección de los derechos humanos, las pruebas de su eficacia son relativamente limitadas.

La respuesta, sugerimos, está en la naturaleza de las propias recomendaciones. Comprender el diseño de las recomendaciones internacionales de derechos humanos y su cumplimiento es importante no sólo para los académicos, sino también para los profesionales que trabajan en los ecosistemas de derechos humanos regionales y de la ONU, en los que los fallos y las recomendaciones son las principales formas en que las organizaciones internacionales intentan mejorar las prácticas de derechos humanos.

La falta de datos sobre recomendaciones

A pesar de la importancia de las recomendaciones de las instituciones internacionales de derechos humanos para la protección de los derechos humanos, las pruebas de su eficacia son relativamente limitadas. Uno de los motivos es la difícil tarea de medir y evaluar los datos relacionados con las recomendaciones. El mero alcance de las recomendaciones es desalentador, ya que los países se ven inundados de recomendaciones de los órganos de tratados de la ONU, del Examen Periódico Universal (EPU) y, en el caso de los Estados europeos, del TEDH. Analizar las recomendaciones y determinar si los Estados las cumplen es una tarea ardua y que requiere mucho tiempo, y ni las instituciones internacionales de derechos humanos ni los profesionales de los derechos humanos suelen disponer del ancho de banda necesario para hacerlo en medio de sus otras tareas.

El nuevo Explorador de Recomendaciones y Cumplimiento de los Derechos de la Mujer (WRRCE, por sus siglas en inglés) ayuda a satisfacer esta necesidad crítica de datos y análisis. Brinda una mirada al interior de los tipos de recomendaciones que reciben los países sobre los derechos de la mujer, la calidad de esas recomendaciones y los pasos que dan los Estados para cumplirlas. Estos nuevos datos proporcionan a académicos y profesionales una importante herramienta para comprender el panorama de las recomendaciones sobre los derechos de la mujer y su cumplimiento en toda Europa. Los usuarios pueden explorar las recomendaciones por país, entre instituciones y a lo largo del tiempo, así como por diferentes características de las recomendaciones, como el nivel de precisión, el tipo de acción de derechos humanos requerida y el estado de cumplimiento.

Por qué es importante el WRRCE y entender las recomendaciones sobre derechos humanos

Las recomendaciones que las instituciones internacionales de derechos humanos dirigen a los Estados representan una de las principales vías por las que estas instituciones internacionales pueden influir en el cambio de los derechos humanos mucho después de su ratificación. Estas recomendaciones son especialmente importantes para proteger a las mujeres en todo el mundo, ya que muchos países han retraído los derechos de las mujeres en los últimos años. Por ejemplo, en 2020, la Corte Constitucional de Polonia prohibió los abortos salvo en casos de anomalías fetales. Esto dio lugar a que más de 1000 mujeres recurrieran al TEDH y, aunque estos casos siguen pendientes, generarán importantes recomendaciones con el potencial de repercutir en la protección de los derechos de la mujer en Polonia. Para que los profesionales de los derechos humanos puedan aprovechar estas recomendaciones de la manera más eficaz, necesitan datos matizados sobre los tipos de recomendaciones relacionadas a los derechos de la mujer que reciben los Estados y cómo y por qué las cumplen.

La información sobre el proceso de recomendación puede ayudar a informar sobre prácticas clave. Por ejemplo, puede ayudar a quienes redactan las recomendaciones a comprender en qué condiciones es probable que las exigencias más específicas produzcan un mayor cumplimiento o cuándo es probable que las recomendaciones más abiertas estimulen la acción en materia de derechos humanos. Estos datos pueden ayudar a responder a las preguntas de los profesionales acerca de cómo delegan las partes interesadas nacionales la responsabilidad del cumplimiento y las oportunidades de participación de la sociedad civil en el proceso de cumplimiento. Al servir como información para la práctica, estos datos pueden tener un impacto clave en el cumplimiento de las recomendaciones, lo que puede cambiar los resultados de los países en materia de derechos humanos.

Vista previa del WRRCE

El WRRCE recoge las recomendaciones del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, el Examen Periódico Universal de las Naciones Unidas y el Comité de las Naciones Unidas para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer sobre dos cuestiones —la violencia contra la mujer y derechos económicos de la mujer— de 2006 a 2017 en 47 Estados europeos. En conjunto, se trata de casi 4000 recomendaciones que los países deben tener en cuenta, priorizar y aplicar.

Tanto los profesionales como los académicos podrían estar interesados en examinar la relación entre lo que las instituciones internacionales piden a los Estados, cómo lo piden y cómo influyen en el cumplimiento el contenido y el diseño de las recomendaciones. El WRRCE permite responder a estas preguntas. Identifica y rastrea los diferentes tipos de recomendaciones que las instituciones internacionales de derechos humanos ofrecen a los Estados, codifica cada recomendación en función de la especificidad de las demandas y, a continuación, permite a los usuarios relacionar esas opciones de diseño con los resultados del cumplimiento. Los usuarios pueden profundizar en un solo país o examinar las tendencias entre instituciones o a lo largo del tiempo.

El camino a seguir

Las instituciones de derechos humanos encargadas de proteger los derechos humanos evalúan continuamente la situación de los derechos humanos en sus Estados miembros y comunican sus conclusiones a través de recomendaciones. A pesar de su importancia crítica, estas recomendaciones han sido poco estudiadas durante mucho tiempo, en gran parte debido a los retos relacionados con la medición de la calidad y el cumplimiento de las recomendaciones. El WRRCE brinda una nueva herramienta para evaluar las recomendaciones en materia de derechos humanos, equipando mejor tanto a los académicos como a los profesionales con datos y conocimientos sobre cómo, por qué y en qué condiciones se pueden aprovechar mejor las instituciones internacionales de derechos humanos para proteger los derechos humanos.